jueves, 12 de julio de 2012

Día 9, Atravesando las montañas hacia Puerto Escondido

Por la mañana salimos del hotelito con las maletas ya preparadas pues hoy abandonamos Oaxaca con una pena muy grande para ir a las playas de Puerto Escondido. Antes aún tenemos que pasar por el mercado para hacer unas compras.







Desayunamos en un muy buen sitio en la puerta del hotel: papaya, mango, unos huevos rancheros y cafecito, (45 pesos) tomamos fuerzas para el largo día de carretera que se nos avecina.

 

Aprovechamos para usar skype y hablar con casa. El mesero nos da indicaciones sobre que camino tomar. El recorrido entre la ciudad de Oaxaca y Puerto Escondido consta de unos 300 km. Las opciones de recorrido son dos; el camino largo de unas 6 h, y el súper largo de 8 h (sí, sí has leido bien).

Al ir a comprar nos damos cuenta que necesitamos cambiar más de nuestros Euros a Pesos (hoy está a 16,13) hace dos días en el DF nos lo cambiaron a 16,3 que lio, esto de el mercado bursatil está muy mal, será culpa de los recortes de Rajoy. Para más INRI nos dijeron que teniamos que llevar una fotocopia del pasaporte para el archivo, No entendemos nada, en el DF no nos lo pidieron y tambien era un BBVA.



Realizados los tramites para el cambio de divisas, nos recorremos los mercados, primero pasamos por una pequeña plaza de artesanias donde encontramos alebrijes (figuritas de madera pintadas a mano) a muy buen precio, entonces nos dimos cuenta que no merece la pena comprarlos en el pueblo donde los pintan (Arrazola) a no ser de que busques algo original. Despues nos fuimos en busca de mole coloradito aconsejados por nuestra casera, en el mercado "20 de nobiembre" lo encontramos a 50 pesos el Kg. Se nos estaba hechando el tiempo encima, cuando por fín encontramos en el mercado "Benito Juárez" la tiendita de bordados a mano que vimos ayer. Hoy la regentaban dos entrañables ancianitos como podéis ver en la foto, y para nuestro asombro nos dieron mejores precios que el chavo que nos atendio ayer.

Con 650 Pesos menos en nuestro bolsillo, pero con un gran recuerdo de Oaxaca y sus gentes nos fuimos a por el carro y las matelas. Cruzando la ciudad manejando, aun tubimos que parar cerca del mercado de las artesanias a comprar mezcal, "El rey zapoteco" por 250 pesos el litro fue nuestra elección. No creo que llegue a España, pero de ser así estan invitados a unos caballitos.

Comenzamos el viaje de hoy.





Tras salir de Oaxaca, la carretera no parece estar mal, pero si llena de topes o reductores que nos acompañan durante todo el camino y que además tienen la habilidad de mimetizarse con el camino de manera que si no los ves a tiempo seguro que te quedas sin ruedas y sin amortiguadores. Va en serio, los ponen tanto en nacionales como en doble vía. Seguro que reducen la velocidad pero a costa de destrozar los coches y gastar un monton de gasolina.

Atravesamos una zona de curvas y pensamos que ya había pasado lo peor pero, ja! aún no sabíamos lo quenos esperaba....






Hacemos una paradita para comer. Será algo sencillito, quesadillas y coronita por 52 pesos, 3 euros entre los dos además de la conversación con el agradable señor del puesto que nos explica el porqué de los topes o reductores. "Evitan accidentes" nos explica. Y accidenta los amortiguadores, pensamos nosotros.


Continuamos el viaje, hay tantas curvas que llevamos una media de 35 km por hora! El paisaje y los pueblos son selváticos y tropicales como Macondo. Los habitantes de la zona son más esbeltos, más guapos, especialmente las indias.

Seguimos entre montañas y de repente nos agarra la niebla. ¿Puede haber niebla a la vez que llueve? pues sí, si que puede y eso es lo que nos pasó. Incluso paramos un poco porque la verdad es que conducir entre montañas con riesgo real de desprendimiento, con niebla y mucha agua por un camino sinuoso es bastante peliagudo. Pero ahí vamos!


Conseguimos atravesar la zona de curvas y de repente mejora el tiempo. Aún nos quedan 40 minutos o así. Todo el camino está firmado por el Carlotta , el último huracán (categoría 1) que atravesó el lugar hace menos de un mes. Árboles caídos, palmeras mochas, tejados volados... Llegamos a Puerto Escondido cuando está ya anocheciendo. Salimos del coche para preguntar por un hotel y recibimos un tortazo de calor. Preguntamos en un par de lugares por alojamiento y nos decidimos por el Hotel Inés, http://www.hotelines.com La habitación está bonita, sencilla, limpia, además tenemos alberca, jardín tropical, estacionamiento..... Así que lo primero que hacemos es darnos un baño en la piscina. El agua está calentita.


Para encontrar el paraíso hay que atravesar montañas y conducir durante 8 horas!

 

 

 

 

 

 

 

 

Damos un paseito y compramos con fruta y avena para cenar.

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario

¿Quieres decirme algo?